El mundo necesita soñadores. Si quieres emprender lo primero que tienes que tener es un sueño, un motivo muy grande por el que apostar y pagar el precio. Nada es fácil, todo requiere un esfuerzo extra, por eso has de tener muy bien definido tu camino para no dejarte vencer por los miedos y no paralizarte ante los obstáculos que sin duda vas a encontrar.